Ahora que Integrity Toys nos ha permitido hacerles "publicidad gratuita" de la esperada tercera muñeca exclusiva para los miembros de The W Club me adelanto a algunos de los blogueros que sigo para dar mi opinión acerca de lo que tenemos a nuestra disposición. Pero ya que esta sección ha nacido a media temporada voy a entrar en materia poco a poco. A fin de cuenta, me gusta escribir y toda buena historia necesita una introducción.
2018 fue, bajo mi punto de vista, un año especialmente fructífero para los miembros de The W Club. Entre sus muchas ventajas destacan las cinco muñecas exclusivas para los miembros del club. The W Club nos agasajó haciendo de esa oferta tradicional no cinco, sino nueve muñecas diferentes.
Dos muñecas que contaban por una, dos giftset con dos y hasta tres muñecas, un minigiftset con ropa extra... Como ya sabéis si habéis leído mis entradas presentando mis adquisiciones, me vine un poco arriba y de las nueve muñecas me hice con siete, dejando fuera precisamente a las que aparecen en los extremos en la foto de arriba. Con semejante experiencia estaba deseandito ver qué me deparaban las muñecas exclusivas del club en 2019.
Por desgracia, llevamos tres y me están dejando, más que fría, helada.
La primera fue Midnight Decadence Poppy Parker, que celebra la primera década de existencia de uno de los buques insignia de Integrity Toys. Su principal reclamo es el vestido "transformable", que no es nada de mi estilo; además me resultó tremendamente decepcionante que a pesar de lo "señalado" de la ocasión repitiesen el peinado de dos muñecas recientes, Welcome To The Misty Hallows de 2017 y la morena de Split Decision de 2018 con un maquillaje que tampoco resulta particularmente bonito.
Si la comparamos con la Poppy del quinto aniversario no hay color, al menos en mi opinión:
Decidí pasar sin demasiado esfuerzo. Apenas unos días después de recibir el correo presentando a Poppy llegó el que mostraba la segunda muñeca del club: Ocean Drive Baroness Agnes Von Weiss.
En su caso optaron por un mini giftset veraniego que incluye un conjunto extra de bañador, pareo y complementos.
En el caso de Agnes mi motivo para pasar es que el suyo es un molde que no me gusta lo más mínimo. Las muñecas de IT, a diferencia de Mattel, apenas sonríen y tienen un rollo como muy altivo, pero en el caso de Agnes es que siempre me ha parecido que tiene cara de que todo le da un poco de asco. Aunque me gusta la ropa y sobre todo cómo le queda con el tono de piel, no me costó demasiado no pulsar el botón para comprarla.
Y así llegamos a la tercera muñeca, o mejor dicho muñecas. Como en 2018 con Unreliable Source Lilith Blair y Reliable Source Eden Blair, dos muñecas cuentan como una sola y se pueden comprar o las dos o sólo una, y como en ese caso se trata de dos muñecas de la línea NU.Face.
Your Motivation Erin Salston tiene una melena entre rubia y castaña con ondas que me recuerda en cierto modo a Lana Del Rey en su primer disco y lleva un vestido lencero, un abrigo de plástico (lo veo y sólo puedo pensar en sudar), sandalias de tacón, cartera de mano y joyería. Destacan las horquillas por ser novedosas (al menos para mí).
Tengo un problema con el molde de Erin. Por algún motiva, me incomoda. Es como si de algún modo estuviera desproporcionado, quizá porque tiene la barbilla redondeada y los labios bastante gruesos. Hay muy, muy pocas Erin que me gusten, así que al ver a esta no me ha cabido la menor duda de que iba a ser que no.
Like No Other Nadja Rhymes tiene una larga melena lacia y viste blusa con estampado de leopardo, shorts de vinilo, abrigo de piel, sandalias con tacón, una especie de brazal que quieren hacernos creer que es un bolso y joyería. Como Erin, lleva horquillas en el pelo.
De Nadja me encanta el tono de piel y tiene una cara muy bonita, pero el resto me chirría: el pelo tan largo y carente de, digamos, "elaboración" me recuerda a la muñeca de Pocahontas que me compraron mis padres en Toys R Us. En ese momento me encantaba que el pelo le llegase por las rodillas, claro, porque uno de los encantos de tener muñecas a los ocho años es cepillarles la melena (¿recordáis cuando las Barbies venían con cepillos para el pelo?), pero en el caso de esta Nadja me da bastante pereza. Mi otra queja es la ropa, fundamentalmente porque no me gusta NADA el animal print. Así que otra muñeca que IT no me va a vender.
La verdad es que el aspecto que tienen estas dos muñecas choca un poco con el glamour de las dos anteriores, que al césar lo que es del césar: ni Poppy ni Agnes son santo de mi devoción, pero tienen clase. Erin y Nadja, en cambio... tienen un rollo un poco de prostitutas.
Con lo entusiasmada que estuve con The W Club en general en 2018 (y eso que no compré todas las muñecas que me habría gustado, perdí unas cuantas lotteries), este está resultando un jarro de agua fría a varios niveles. Sí, de momento llevo varias muñecas en la cartera, pero las exclusivas del club me están dejando que desear, la verdad. A ver si la cosa se arregla un poco con las dos que quedan. ¡Crucemos los dedos!
